Las asignaturas pendientes de las terapias naturales
El desconocimiento, la mala información y cierta desconfianza hacia algunas técnicas y hacia algunos profesionales son las asignaturas pendientes de las terapias naturales. A todo esto hay que añadir otro talón de Aquiles de primera magnitud: la ausencia de una regulación que dé seguridad y confianza a los usuarios.
Así lo dice el Observatorio de las Terapias Naturales, elaborado por Cofenat, que en su estudio cualitativo hizo reuniones de grupo con usuarios y no usuarios. Los resultados de la investigación indican que se ha detectado una mentalidad más abierta —incluso dentro del colectivo sanitario—, que hay un mayor conocimiento e interés por otras culturas y que las terapias alternativas cubren las necesidades derivadas del ritmo de vida actual.
Los usuarios destacan, como aspectos positivos, que tratan al ser humano desde un punto de vista holístico, que no tienen efectos secundarios, que son tratamientos que se pueden compatibilizar con la medicina tradicional, que permiten la prevención y la curación tanto física como anímica y que propician un cambio en el estilo de vida.
Los usuarios descubren las terapias naturales sobre todo por el ‘boca-oreja’ y, en segundo término, a través de los centros de salud (herbolarios, farmacias, etc.) A menudo es la última alternativa que encuentran después de diagnósticos y tratamientos fallidos.
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