Teresa Forcades: la influencia indebida del sector privado en la salud pública

Teresa Forcades, médico, doctora en salud pública y monja benedictina, llenó hasta los topes la sala principal de conferencias en la VII Fira d’Alimentació i Salut, celebrada en Balaguer (Lleida) el primer fin de semana de octubre de 2013. Teresa Forcades pronunció la conferencia “La medicalización de la sociedad: los ejemplos de la sexualidad y la bebida”.

Teresa Forcades centró la primera parte de su intervención en las operaciones quirúrgicas  para modificar los genitales externos de las mujeres sin que haya un motivo de salud que lo justifique. Es decir, cada vez hay más mujeres decididas a hacerse amputar sus labios menores (labioplastia) al considerarlos demasiado largos, anormales o feos. Esta creencia por parte de la mujer, según la religiosa, viene dada porque se han normalizado los estándares de belleza de los modelos de revista. Para Teresa Forcades, “en lugar de reconocer la variabilidad natural de tamaño y forma de los genitales femeninos, lo que se hace es patologizar la variabilidad natural definiendo unos parámetros artificiales de normalidad cada vez más restrictivos”. Para ella, se trata de un ejemplo de medicalización de la sexualidad. Teresa Forcades comparó la labioplastia con la amputación genital femenina y formuló la pregunta crítica de por qué la primera es tolerada y, en cambio,  la segunda es considerada un crimen, si ambas prácticas tienen una motivación cultural.

Otro ejemplo de medicalización de nuestras vidas, según Teresa Forcades, es la práctica que han desarrollado las compañías productoras de bebidas energéticas como Gatorade, Powerade y Lucozade: han conseguido que las personas desconfíen de su mecanismo natural de regular la sed. Estas empresas han creado institutos de ciencia del deporte o alianzas con el sector público (partenariados públicos-privados en que la parte privada siempre tiene el último poder de decisión). Desde estos institutos se han publicado estudios y guías clínicas que recomiendan beber cada 15 minutos cuando se realiza deporte. Así se evitarán las hiponatremias (bajadas de sodio en la sangre) que han provocado edemas cerebrales y muertes de maratonianos. Teresa Forcades habló de otras investigaciones que demuestran que las hiponatremias suelen ser provocadas por un exceso de líquido más que por deshidratación. También señaló el problema de la obesidad infantil cuando a los niños deportistas se les recomienda beber líquidos con tantos carbohidratos.

Teresa Forcades concluyó su conferencia denunciando la influencia indebida del sector privado en la medicina y la salud pública. Aseguró que las estrategias de empresas de bebidas deportivas tiene efectos tanto en las revistas médicas como en las facultades de Medicina. Teresa Forcades también puso en entredicho la independencia de la Organización Mundial de la Salud, organismo creado en 1947 para velar por la salud a escala planetaria. Aunque en sus inicios la OMS estaba financiada por sus estados miembro (actualmente 198 países), las aportaciones públicas han ido decreciendo con los años, al mismo tiempo que se daba paso al capital privado. En la actualidad, las aportaciones de las empresas privadas superan el 50% del presupuesto de la OMS y las tres principales organizaciones que la financian son, por este orden, la Fundación de Bill y Melinda Gates, Coca Cola y Nestlé. Así pues, según Teresa Forcades, es difícil que la Organización Mundial de la Salud tome partido en contra de ciertos intereses privados.

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Nota: Post recuperado del antiguo blog de la agencia Mind and Body.